Barrios fue consultado este jueves sobre las planillas que están recorriendo las instituciones públicas para recolectar firmas a favor de la enmienda. Al respecto dijo que están circulando las hojas, pero por voluntad propia de los funcionarios.
El titular de la cartera sanitaria también negó que existan amenazas o presiones a aquellos trabajadores que no desean acompañar esa medida. Considera que las denuncias provienen de sectores de la disidencia que no están de acuerdo.
Al secretario de Estado también le consultaron si el presidente Horacio Cartes mintió a la gente con respecto a su reelección, atendiendo a que en reiteradas ocasiones negó la búsqueda de un segundo periodo al frente del Ejecutivo.
“El Presidente no mintió a la gente, es la presión de la gente que quiere la reelección del señor Presidente”, expresó Antonio Barrios.
Señaló que esperarán si existe el instrumento que permita la reelección y luego se verá la decisión del mandatario. Sin embargo, reiteró que es la ciudadanía la que le impulsa al jefe de Estado a continuar con su proyecto al frente del Gobierno.
Tanto el ministro de Salud como el presidente de la República participaron en la fecha de la entrega de juguetes a los niños del hogar Santa Teresita, por el Día de los Reyes Magos.
ESTRATEGIA. El oficialismo insiste en violar la Constitución Nacional al promover la recolección de firmas para aprobar la enmienda que posibilite la reelección presidencial de Horacio Cartes. Expertos constitucionalistas señalan la violación del artículo 290 de la Carta Magna, además de disposiciones legales vigentes.
Los principales referentes del Gobierno de Cartes apoyan la estrategia y hasta justifican que se realice la actividad de juntar las firmas dentro de las instituciones públicas, violentando lo que establece el artículo 60 de Ley 1626 de la Secretaría de la Función Pública (SFP).
El jefe de Gabinete, Juan Carlos López Moreira, respondió ayer que no ve nada de malo en que se estén pidiendo firmas. “Ahora, si están forzando o haciendo que se le fuerce a hacer firmar, eso es otra cosa y sí es una irregularidad”, apuntó. Pidió a los funcionarios denunciar cualquier presión ante la prensa y la Secretaría Nacional Anticorrupción (SNC).
La estrategia del cartismo surge luego de que fracasó el año pasado la negociación para cerrar los votos necesarios en la Cámara de Senadores para aprobar la polémica figura, que fue rechazada justamente por el sector de la oposición y los colorados disidentes.