De acuerdo con informaciones del Sindicato de los Policías Civiles de Espírito Santo, 13 personas fueron asesinadas entre la noche del lunes y la madrugada de este martes en ese estado del sureste de Brasil, vecino a Río de Janeiro, con lo que ya suman 75 las muertes violentas desde el sábado.
El gobierno regional no ha divulgado informaciones oficiales sobre el número de homicidios ni sobre el aumento de los índices de violencia, pero imágenes transmitidas por las redes de televisión muestran saqueos masivos a comercios y calles vacías en Espíritu Santo, principalmente en su capital, Vitória.
La violencia prosiguió pese a que el Gobierno federal de Brasil autorizó que los militares ayuden en la vigilancia de las calles mientras siga la huelga de policías.
Desde el final de la tarde del lunes ya era posible ver a miembros del Ejército en las calles de Vitória.
A los militares se sumaron este martes cerca de 1.200 miembros de la Fuerza Nacional de Seguridad enviados igualmente por el Gobierno de Brasil a petición de la Gobernación de Espírito Santo.
El Sindicato de los Policías Civiles, que en el país son responsables por las investigaciones y en Espírito Santo no secundaron la huelga de los Policías Militarizados, informó que 24 personas fueron detenidas en flagrante en la madrugada del martes por crímenes como robo, hurto y tráfico de drogas.
El mismo sindicato comunicó que el Instituto Médico Legal de Vitória ya no da abasto ante el número de víctimas de homicidio que ha recibido en los últimos cuatro días y que, como los cuerpos ya no caben en sus cámaras refrigeradas, están siendo transferidos a algunos hospitales. El número de homicidios en cuatro días supera en 1.525 % el registrado en todo el mes de enero. efe