Tras la sesión de la Junta de Calificaciones de las Fuerzas Armadas y una vez que se dieron a conocer los nombres de los militares que ahora ocupan cargos de comandantes, aparecieron los descontentos internos y cuestionamientos a las decisiones tomadas.
Una de ellas apunta a que la orden de nombramientos se firmó antes de la conformación del Tribunal de Calificaciones y que no se tuvo en cuenta la capacidad y preparación de los militares para ocupar puestos claves en el comando.
También cuestionan que muchos de los militares que serán ascendidos fueron parte del primer anillo del general Luis Gonzaga Garcete, quien ahora debe pasar a retiro.
Sobre Garcete pesa una serie de denuncias de supuestos casos de corrupción que no son investigados por la Contraloría ni la Auditoría del Poder Ejecutivo.
correspondencia. Un grupo de efectivos militares se pusieron en contacto con ÚH para presentar un memorándum en donde exponen una serie de situaciones irregulares que se dan en la institución castrense.
Señalan que la Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado debe solicitar un informe a la Contraloría sobre un examen de correspondencia para determinar si corresponde la declaración jurada de bienes que presentaron con lo que poseen actualmente. En las denuncias se señalan que muchos de los que ahora son jefes poseen estancias y hasta playa de autos.
objeciones. En la nómina presentada aparecen hombres de confianza de la era Garcete. Entre ellos, objetan el nombre del coronel Severiano Rodríguez, actual jefe de Estado Mayor del Comando Logístico. Los militares apuntan que cuenta con seis demandas judiciales. Una de ellas es con la Caja de Préstamos del Ministerio de Defensa. Señalan que la Ley 1115 de la Ley Militar no permite que efectivos militares puedan ocupar cargos de importancia cuando tienen demandas judiciales.
También cuestionan que el coronel Ignacio Zárate está desde hace tres años como director del Centro Financiero Nº 2 del Comando del Ejército. Fue hombre de confianza de Garcete. Los militares piden que se realice un informe de auditoría sobre la compra de muebles en el ejército.
En el caso del coronel Luis Hermosilla, director del Centro Financiero Nº 5 del Comando Logístico, señalan que el mismo fue hombre de confianza del general Garcete. Era director del Centro Financiero Nº 1 de Fuerzas Militares.
Y el coronel Carlos Duarte, director de la Dirección General del Servicio Tren (Digentren), en la era Garcete percibía un salario de G. 30 millones, entre bonificaciones y premios alcanzados por ser hombre de confianza.