Se comunicaron con ÚH para denunciar que el comandante del REP saliente, coronel Eulogio Ortega, no paga hace tiempo ese beneficio.
Deberían cobrar la suma de G. 116.000 por mes en este concepto. En total cada efectivo militar debió percibir la suma total de G. 348.000 en los últimos tres meses.
A eso se suma los viáticos que perciben G. 50.000 por cada cobertura que deben realizar en las actividades que el presidente Horacio Cartes realiza fuera de Mburuvicha Róga o el Palacio de Gobierno.
Los efectivos consultaron a los responsables administrativos, pero hasta el momento no recibieron ninguna respuesta concreta.
El presidente de la República nombró a su edecán coronel Manuel Rodríguez como nuevo comandante del Regimiento Escolta Presidencial. Mientras que el coronel Eulogio Ortega dejó el REP y fue enviado como comandante en la IV División de Infantería en Concepción.
Parque automotor. Además de la falta de pago que están arrastrando los efectivos militares también denunciaron las pésimas condiciones en que se encuentra el parque automotor del Regimiento.
Con fotografías enviadas a este medio informaron que solamente está funcionando un colectivo y deben solicitar ayuda de otras unidades, a fin de prestar sus vehículos para las distintas coberturas presidenciales que se realizan en el interior del país. Mientras en el regimiento hay 4 camiones Ford Cargo, que según los efectivos están carneados.
A ello se suma otros 2 colectivos que no tienen ninguna utilidad por falta de mantenimiento de parte de las autoridades salientes.
El pasado 19 de octubre, el vicesargento primero de Infantería, Óscar Cardozo, elevó informe a su superior para explicar los motivos de su ausencia en el servicio del Regimiento Escolta Presidencial.
Allí ya le puso al tanto a las autoridades de las incomodidades y la precariedad que reina en el REP, llegando incluso hasta un trato denigrante hacia los uniformados que pertenecen a esa división, según dijo.
Entre las quejas, figura la falta de una alimentación adecuada, la falta de tiempo libre y los denigrantes tratos, como por ejemplo, el traslado de los militares en compañía de perros, y en vehículos no aptos, según el militar, que luego fue sumariado.