El presidente de México, Enrique Peña Nieto, y Trump dieron algunas muestras el miércoles de lo que será su nueva y compleja relación.
Peña Nieto dijo que buscará negociaciones abiertas y completas con el próximo Gobierno de EEUU y que todos los temas están sobre la mesa, incluyendo la seguridad, la migración y el comercio.
Pero enfatizó, “en ningún momento aceptaremos nada que vaya en contra de nuestra dignidad como país y nuestra dignidad como mexicanos”. Peña Nieto prosiguió: “es evidente que tenemos algunas diferencias con el próximo Gobierno de EEUU, como el tema de un muro que México, por supuesto, no pagará”.
Trump –que ha enfurecido a los mexicanos al llamar a los inmigrantes de este país violadores– declaró en conferencia de prensa horas antes en Nueva York que México le ha sido tan agradable.
Pero el magnate republicano dijo que comenzará rápidamente a trabajar en el muro y que México reembolsará a Estados Unidos el costo de la obra a través de un impuesto u otra forma de pago no especificada.
“Vamos a construir un muro. No quiero esperar cerca de un año o un año y medio hasta que finalicen mis negociaciones con México, que empezaremos en cuanto asuma”, dijo Trump en su primera conferencia como presidente electo.
El costo de construir esa obra –que podría ser más una cerca que un muro, según analistas– podría ser de hasta 25.000 millones de dólares. afp