Merkel hizo estas declaraciones a su llegada a la cumbre extraordinaria de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) en la capital maltesa, La Valeta, al ser preguntada sobre las opiniones vertidas por Trump acerca del futuro de Europa.
La canciller rechazó referirse al presidente estadounidense y agregó que en la cumbre “la prioridad es hablar sobre Europa y no sobre otras partes del mundo”.
Recordó que el tema principal que abordarán los líderes europeos es la crisis de los refugiados y, sobre todo, la situación en el Mediterráneo y en Libia, país que necesita una “situación estable”.
Merkel subrayó que todavía queda mucho trabajo por hacer, al tiempo que expresó su apoyo al gobierno de unidad en Libia.
Señaló que la situación de los refugiados en ese país es “dramática” y agregó que hay que trabajar con Libia en la misma línea que con Turquía, con el objetivo de poner freno al tráfico ilegal de personas y mejorar la situación de los solicitantes de asilo.
En ese sentido destacó también como ejemplo al acuerdo que Alemania ha cerrado ya con Níger, como país de tránsito de los flujos de refugiados.
Recordó, además, que la cumbre servirá para hablar sobre un nuevo sistema europeo de asilo, para lo cual la canciller se mostró convencida de que la UE está “muy bien preparada”.