El suceso ocurrió el pasado domingo en un salón que ya había sido clausurado por el ministerio hace un año.
Pese a estar en conocimiento de la situación, las carpas llegaron recién ayer, tras las reiteradas denuncias de los padres de familia.
“Hace más de un año que pedimos y ahora nos traen (por ayer)”, lamentó una de las madres. Reclamaron igualmente que el Municipio local prometió la reconstrucción de salas de clase, pero recién en 22 días iniciarían estas obras. Mientras, las clases se darán en una iglesia cercana.