“Haremos la reforma judicial, pero no para mí, para el pueblo: para buscar una Justicia independiente”, anunció varias veces el legislador disidente.
Aseguró que si gana la elecciones va a impulsar una reforma constitucional que intentará terminar con la burocracia estatal, lograr la independencia del Poder Judicial e incluir la figura de la reelección presidencial.
“El sistema judicial tiene que entender que la sociedad está cansada de la impunidad, porque la corrupción es consecuencia de la impunidad”, es también una de las frases que viene diciendo el candidato de Colorado Añetete.
El senador manifestó en varias entrevistas que el Poder Judicial está sometido al poder político, “lo cual hace que funcione para beneficiar a los más poderosos y se olvida del pueblo”.
En tanto, el candidato del oficialismo, Santiago Peña, no habla de reformas.
Señaló que aún no hay madurez en el país como para avanzar hacia este mecanismo, ya que teme que implique más riesgos que ventajas, y prefiere las “enmiendas”. No obstante, habla de la necesidad de establecer reformas profundas en varios campos importantes para mejorar el Estado paraguayo, pero que seguirá la misma línea del gobierno actual de Horacio Cartes.
Por su parte, Luis Gneiting comentó recientemente que de ser electo como vicepresidente impulsará una reforma constituyente.
Sugirió que los temas que deben de ser modificados son el sistema electoral, Consejo de Magistratura, Jurado de Enjuiciamiento, la Policía Nacional y la reelección presidencial. Esto con base en que desde la vicepresidencia se podrá realizar un mejor nexo con el Poder Legislativo, según aseguró Gneiting.
Otros temas necesarios serían también la función de algunos organismos y la injerencia política dentro de otros poderes, sobre todo en el caso del Poder Ejecutivo que para el político se encuentra muy sometido al Poder Legislativo. Citó que esta opinión la hizo a título personal.