Un grupo de representantes de la Cámara Paraguaya de la Carne se reunió ayer con el ministro de Industria y Comercio, Gustavo Leite, para manifestarle su desacuerdo con algunos puntos del proyecto de ley y solicitar su apoyo, informó Korni Pauls, presidente del mencionado gremio.
El principal cuestionamiento de los industriales hacia la propuesta presentada en la Cámara de Diputados, es la forma de financiación del instituto.
Se plantea que el aporte provenga de los exportadores y frigoríficos, en partes iguales. No obstante, el Estado tendrá participación en el manejo de la institución.
No es la primera vez que los industriales hacen lobby para frenar la propuesta. El mes pasado, pidieron al presidente de la Cámara Baja, Hugo Velázquez, el aplazamiento del tratamiento del proyecto de ley en sesión. En la ocasión, la Cámara Paraguaya de la Carne adelantó que analizarán el documento, y harían otra propuesta, o bien, presentarían las objeciones con respecto al proyecto en estudio.
El proyecto de ley habla de que el instituto paraguayo de la carne sería administrado por el sector privado, representado por la Asociación Rural del Paraguay (ARP) y la Cámara Paraguaya de la Carne, con participación “imprescindible” del Ministerio de Relaciones Exteriores, el Ministerio de Industria y Comercio, el Ministerio de Agricultura y Ganadería y el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa), por el sector público.
Mientras que los industriales tratan de frenar o modificar la propuesta, en otras instancias, se registran algunos avances.
El martes último, se llevó a cabo una audiencia pública en la Cámara de Diputados, que contó con la participación de los parlamentarios, de representantes de Senacsa, de la Cancillería y de otras instituciones del sector cárnico.