La convocatoria inició minutos después de las 20:00 en la avenida Costanera de la ciudad de Asunción y contó con la presencia de usuarios de vehículos equipados además de trabajadores y representantes del gremio de metalúrgicos. Estos últimos argumentan que de prohibirse el uso de paragolpes y molinetes en las camionetas, alrededor de 3.500 personas quedarán sin sus puestos de trabajo.
El objetivo de la caravana es la modificación de los artículos 52, (numeral 2) y 66 (inciso W) de la Ley de Seguridad Vial ya promulgada por el Ejecutivo. Ambos artículos fueron remitidos por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).
Federico Centurión, uno de los organizadores de la marcha, expresó su desacuerdo y señaló que afectaría a quienes trabajan en la zona rural. Acotó que contar con estos elementos es indispensable y que los paragolpes son indispensables a la hora de rescatar a otros vehículos que quedan varados por el pésimo estado de los caminos vecinales en el interior del país.
El recorrido de la caravana comprendió la avenida Colón, las calles Estrella y Brasil, la avenida Mariscal López, República Argentina y Aviadores del Chaco hasta llegar al parque Ñu Guasu.