La representante del Ministerio Público explicó que la niña de 10 años fue víctima de varios manoseos y fue expuesta a pornografía durante mucho tiempo por parte de su padrastro. Todo había ocurrido en una vivienda del barrio Luis Alberto de Herrera, de Asunción.
La fiscala añadió que la menor de edad quedó con secuelas sicológicas y un grave daño en su autoestima.
Luego de la denuncia el proceso de persecución penal duró aproximadamente dos años. El hombre había sido beneficiado con medidas alternativas a la prisión mientras duraba el proceso.
Si bien la agente fiscal Pereira indicó que tuvo una satisfacción al lograr la condena del abusador de niños, también sufrió una gran decepción cuando la misma madre de la víctima había solicitado una pena baja para el acusado de abusar sexualmente de su hija.
Cuando el Tribunal de Sentencia le preguntó a la madre de la niña si quería mencionar algo en nombre de su hija, ella pidió a los magistrados la suspensión de la ejecución de la condena para el hombre que abusó de la menor de edad, que además era su pareja.