¿Dónde estará Edelio y será que está con vida? Se pregunta en la carta que en el pasado jueves, escribió doña Obdulia al sentir una fuerte añoranza por su hijo Edelio Morínigo, agente policial que está en manos del EPP desde hace 902 días. Consumida por la desesperación, tomó una hoja y lápiz y escribió un verso en guaraní, plasmando en él su angustia de madre que pide clemencia al grupo armado para poner fin al cautiverio del suboficial.
“Es la única vía que tengo para expresarme, porque no tenemos noticias de él, no tengo forma de comunicarme con él”, expresó la madre del agente tras salir de una reunión que mantuvo por primera vez con el ministro del Interior Tadeo Rojas.
“Salimos contentos de la reunión, demostraron buena predisposición, dijeron que están en lucha constante y que van a mantenerse en esa línea para lograr que Edelio regrese con vida”, dijo. Luego leyó el escrito dedicado a su hijo.
“Nosotros, amigos, somos pobres, como madre, pido que lo liberen. Antes de morir, deseo ver a mi hijo que tanto amo. Ya basta de hacernos sufrir”, refiere el escrito.
Doña Obdulia manifestó que mucho conversó con el ministro. Señaló que le dieron nuevas esperanzas durante la reunión. Los padres del suboficial refieren que no hay otra alternativa que seguir insistiendo con las autoridades, ya que no reciben mucha información.
PEDIDO. “Nosotros no tenemos ninguna prueba de vida y estamos angustiados, vinimos acá porque llega la fiesta de Navidad y por eso pido por favor que lo liberen o por lo menos entreguen esa prueba”, suplicó la mujer.
“Lo mejor que puede pasar es que suceda un milagro y que para estas fiestas, como lo hicieron con Arlan Fick (liberado el 25 de diciembre del 2014) para que esté con nosotros y que sea nuestro regalo de Navidad; les imploro, les ruego que lo liberen”, manifestó la angustiada madre del suboficial.
Doña Obdulia cuenta que las autoridades le aseguraron que el agente está con vida. Ella cree en esa posibilidad, porque si le pasó algo, ya hubieran encontrado su cuerpo, lo hubieran dejado en una zona en donde se lo podía ubicar.
“Si mi hijo me ve o me escucha, quiero que sepa que lo extrañamos demasiado y como madre tengo fuerza y valor para seguir luchando a favor de él. Mi hijo, estoy contigo, te doy las fuerzas necesarias para sobrellevar todo esto. Siempre me vas a tener apoyándote”, transmitió con vehemencia doña Obdulia, quien en compañía de su marido Apolonio Morínigo participó de una misa en la Catedral de Asunción.