De acuerdo con la Policía Militar, un grupo de manifestantes se congregó en la Praça da Se, en el centro de Sao Paulo, la capital regional, y se desplazó hasta la sede de la oficina encargada de las soluciones de vivienda popular.
La movilización, que según los organizadores contó con la participación de unas 1.500 personas, tenía por objetivo la regularización de algunos terrenos ocupados para que sean destinados a proyectos de vivienda y de la participación del MTST en las reuniones de conciliación con los propietarios.
Sobre las reivindicaciones, Boulos dijo a periodistas que el pedido es “para que no veamos en las próximas semanas escenas como las del ultimo martes”, cuando él fue detenido durante el desalojo de una ocupación.
“Es obligatorio por el Código de Defensa Civil el aviso previo de un oficial de Justicia para que las familias tengan medios para desocupar. Esa vez las familias fueron retiradas brutalmente de un lugar donde vivían hace más de un año y medio”, apuntó.
De acuerdo con el activista, muchas familias “invirtieron todo lo poco que tenían para hacer sus casas allí. Hubo máquinas pasando por encima de casas con heladeras y fogón. Muchas personas están en la calle o fueron acogidas por parientes. Fue una barbarie”.
Boulos salió la noche del martes de una comisaría ubicada en la zona este de Sao Paulo, rodeado de simpatizantes del movimiento, tras prestar declaración a las autoridades.
Sobre su detención después del desalojo de unas 700 familias, Boulos comentó que “es una clara persecución política con el objetivo de intimidar al MST”, pero “eso no dio resultado” porque dos días después el movimiento está de nuevo en las calles.