Los votantes parecían preocupados por la dirección que tome la nación y dijeron que quieren “un líder fuerte que pueda recuperar el país de manos de los ricos y los poderosos”, de acuerdo a una encuesta de Reuters/Ipsos.
El sondeo a más de 10.000 personas que fueron a votar mostró que una mayoría está preocupada por la capacidad de los candidatos para sacar al país adelante. Muy pocos mostraron confianza en que los partidos políticos puedan mejorar su situación.
Una presidencia de Clinton aportaría continuidad a los ocho años de Barack Obama en la Casa Blanca, aunque si los republicanos retienen el control de al menos una Cámara en el Congreso podrían venir más años de estancamiento político.
Un triunfo de Trump podría agitar algunos de los cimientos fundacionales de la política exterior estadounidense, como la alianza de la OTAN y el libre comercio, y revertir ciertos logros de Obama a nivel local, como su ley de salud de 2010.
Una fuerte participación de votantes de Clinton podría complicar el control republicano del Senado, ya que se eligen 34 legisladores en la Cámara de 100 miembros. Los demócratas necesitan una ganancia neta de 5 escaños para hacerse con el control. Los 435 escaños de la Cámara de Representantes están en juego, pero se espera que siga en manos republicanas.
El promedio industrial Dow Jones cerró con un alza de un 0,4 por ciento, con los inversores apostando por una victoria de Clinton, vista por Wall Street como la candidata que generará mayor estabilidad política y financiera.
Las elecciones estaban teniendo su impacto en el vecino México donde el peso operaba errático en un mercado cauto que pasaba rápidamente de terreno positivo a negativo, mientras se daban a conocer los primeros resultados de las encuestas a boca de urna de la cerrada contienda presidencial en Estados Unidos. reuters