Pocas veces se percibe tanta rapidez y agilidad por parte de los senadores y diputados para atender reclamos, como el que se demuestra al atender un pedido de aumento de remuneraciones por parte de los funcionarios del Poder Legislativo.
Tras una manifestación que realizaron los funcionarios el pasado miércoles, frente a la bancada A de la Asociación Nacional Republicana, tanto los senadores como los diputados decidieron unificar en un proyecto el pedido de ampliación presupuestaria para conceder un tercer aguinaldo, amparándose en un reglamento del Ministerio de Hacienda que da vía libre a este tipo de pedidos, si es que las instituciones alegan “mejor y mayor producción” del personal estatal.
Según el cronograma dispuesto, el documento sería estudiado este miércoles, en horas de la tarde, y el jueves a la mañana ya tendrá sanción en el Senado. De esta manera, en menos de 24 horas, los funcionarios ya podrán disponer del aumento solicitado. El monto total de la ampliación solicitada por ambas cámaras es de 12.599 millones de guaraníes, de los cuales 8.800 millones corresponden a Diputados y 3.117 millones a Senadores. Igualmente, 682.100.000 guaraníes es el aumento solicitado para el Congreso Nacional, que incluye al Parlasur, Cabildo y otros entes.
Los funcionarios, además del aguinaldo que perciben en el mes de diciembre, también se benefician con otro en junio, y ahora percibirán uno más, con lo que completarían tres aguinaldos en el año, situación que se replica en todas las instituciones estatales.
Más allá de si realmente se ha confirmado o no que los funcionarios del Congreso trabajen y produzcan más, como expresa la fundamentación del pedido realizado en base al reglamento del Ministerio de Hacienda, resulta llamativa la gran celeridad mostrada por los legisladores en resolver esta situación cuando existen muchos otros proyectos de leyes y cuestiones legislativas que son de gran importancia para la ciudadanía, pero que siguen paralizados por años.
Uno de esos casos pendientes es el del nombramiento del defensor del Pueblo, cuyo actual titular ya lleva ejerciendo más de 8 años con mandato vencido, sin que los congresistas logren ponerse de acuerdo para elegir a un sucesor por anteponer los intereses políticos sectarios a los de la mayoría, porque los principales sectores quieren nombrar a alguien de su partido a quien puedan manejar. El otro tema que espera es el de la designación de un nuevo contralor, ya que el actual ejerce en forma interina desde que una investigación periodística de ÚH sobre corrupción forzó a la renuncia de quien estaba al frente, en agosto de 2015. ¿Será posible que en estos casos puedan demostrar la misma agilidad que tienen en regalar el dinero público?