En la apertura, la experta del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma), Jacqueline Álvarez, afirmó que “si hoy nos preguntaran cómo está constituido el cuerpo humano, si es el mismo que el de las personas que nacían en el siglo XIX, todos diríamos que sí. Sin embargo, hoy un bebé que nace tiene más de 100 productos químicos en su organismo”. Estuvo a cargo del acto de bienvenida el director de Calidad Ambiental de la SEAM y Punto Focal del Convenio de Estocolmo, Fernando Brítez.
En la ocasión estuvieron presentes funcionarios de la Secretaría del Ambiente; la Administración Nacional de Electricidad; El Instituto de Previsión Social; el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social; la Secretaría de Emergencia Nacional; el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social; el Servicio Nacional de Erradicación del Paludismo; el Instituto Nacional de Tecnología Normalización y Metrología; el Instituto Nacional de Alimentación y Nutrición; el Ministerio de Industria y Comercio; Aceros del Paraguay; Itaipú Binacional; Centro Nacional de Toxicología, de Laboratorios, como Díaz Gill, Analítica, Laboratorio Central del MSPyBS, Laboratorio de Investigación de la Atmósfera y Problemas Ambientales (LIAPA) de Facen, de la Universidad San Carlos y de organizaciones como la Asociación de Agrónomos del Paraguay, entre otros sectores relacionados al Convenio de Estocolmo.
Entre otros puntos, se analizaron avances y desafíos en la gestión de COPs, orígenes y riesgos que implican los nuevos y viejos COPs para la salud y el medio ambiente, así como la técnica de actualización del Inventario COPs.
Los Contaminantes Orgánicos Persistentes (COPs) son sustancias químicas muy tóxicas y duraderas que representan un grave peligro para el medio ambiente y la salud humana -incluso en baja concentración- debido a sus diversas propiedades.
El Convenio de Estocolmo sobre Contaminantes Orgánicos Persistentes (COPs) es un tratado internacional que fue firmado por el Paraguay en mayo de 2001 y ratificado por Ley 2.333 del 6 de enero del 2004.
El proceso de Revisión y Actualización del Plan Nacional de Aplicación de los Contaminantes Orgánicos Persistentes (PNA-COPs) permitirá al Paraguay cumplir con lo dispuesto en el Art. 7° del Convenio y, finalmente, contribuir a la protección de la salud y el medio ambiente a través de la gestión adecuada de los contaminantes orgánicos persistentes.