“Esto era un sueño hace dos años”, indicó Jay Z en una conferencia de prensa organizada en el ayuntamiento de la ciudad, donde estuvo acompañado por el alcalde, Eric Garcetti. “Tuve la visión de organizar un festival que desdibujará las líneas entre los distintos géneros”, agregó.
El certamen, que espera atraer a unos 50.000 asistentes, se celebrará entre el 30 y el 31 de agosto en Grand Park y sus zonas aledañas, a escasos metros del Ayuntamiento. Esas son las mismas fechas en las que se organizará el mismo festival en Filadelfia.
La edición de 2013 de Made in America en el histórico Benjamin Franklin Parkway de Filadelfia atrajo a 60.000 espectadores para los conciertos de Beyoncé -esposa de Jay Z-, Deadmau5, Kendrick Lamar, Miguel, Nine Inch Nails, Phoenix, Public Enemy, Queens of the Stone Age, Macklemore & Ryan Lewis y Calvin Harris.
Jay Z no dio detalles sobre los artistas que actuarán en la nueva edición de Los Ángeles, pero prometió un amplio repertorio de géneros, desde el pop y el rock pasando por el soul, el hip-hop y la música electrónica.
“Vamos a celebrar nuestro estado de ánimo dorado. Los Ángeles es la capital mundial de la música. La industria musical ha ayudado a construir esta ciudad y el sector creativo es esencial para nuestra economía”, indicó Garcetti.
El alcalde, consciente de las críticas esgrimidas por personalidades como el concejal José Huízar sobre la localización del evento, destacó el impacto económico que tendrá el festival sobre la ciudad, y recordó que la primera edición del certamen en Filadelfia se tradujo en ganancias superiores a los 10 millones de dólares.
