EFE
“Van 174 deslizamientos, 210 inundaciones, más de 56 vendavales, 39 crecientes súbitas, 306 municipios afectados, 2.830 familias afectadas, 910 viviendas destruidas y 389 personas fallecidas”, dijo el mandatario al presentar un balance, en la Casa de Nariño, de las acciones para atender la emergencia metereológica.
Según Santos, “las lluvias llegaron a su punto máximo esta semana y, aunque va a seguir lloviendo, no será con la intensidad de estos últimos días”.
Las últimas tres víctimas mortales que deja la temporada invernal se registraron en la madrugada de hoy, cuando una mujer y dos menores de edad fueron sepultados por un deslizamiento de tierra en el municipio de Soacha, aledaño al sur de Bogotá, según informaron las autoridades locales.
Al respecto, el director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, Carlos Iván Márquez, confirmó que el invierno en el país, que ha provocado el desbordamiento de varios ríos, ha dejado 22.000 familias damnificadas, entre ellas, las de la tragedia en Mocoa ocurrida en febrero pasado, que cobró la vida de 329 pobladores.
“Afortunadamente la parte crítica de la primera temporada de lluvias empieza a tener un declive. Eso quiere decir que van a mejorar las condiciones pero se mantiene la prevención, sobre todo en la cuenca de los ríos Magdalena y Cauca”, los más importantes del país, precisó Márquez.
El presidente Santos le pidió a las autoridades locales no bajar la guardia y seguir adelante con los planes para enfrentar emergencias como la actual.
“Esta temporada nos hubiera golpeado más sino hubiéramos construido las obras de mitigación y prevención en los últimos años. Por eso hay que seguir haciéndolas en asocio con la Unidad de Gestión de Riesgo”, comentó el jefe de Estado.
Como parte de la ayuda humanitaria entregada por el Gobierno nacional a los afectados por las lluvias, Santos manifestó que se han distribuido 27.900 mercados, 140.000 kits no alimentarios como frazadas y colchonetas, y 11.150 subsidios de arriendo”.
