Además del contenido de los paquetes, que incluye dos kilos de yerba mate y de coquito para treinta días, se mostraron en desacuerdo por la forma de entrega, que califican como de “acto político”.
“Debieron incluir leche por lo menos, con cocido negro en nada combatirán la desnutrición; y alguna galleta con suplementos alimenticios, no con coquito”, manifestó en las redes la lectora Carmen Camacho. Otro punto en contra de los planificadores, según los lectores, fue el de no incluir verduras.
Para el secretario general de la Unión Nacional de Educadores (UNE-SN), Eladio Benítez, es mejor si el Estado se plantea la ampliación de la merienda y el almuerzo escolar en los centros educativos.
“Sería interesante que primero se universalicen estas dos opciones, para los niños sobre todo. No está llegando a sectores más vulnerables, pero parece más algo político partidario el kit que una política estatal de mejoramiento de la calidad educativa”, aseguró.
Unos 4 kilos de azúcar, 2 kilos de yerba, 2 kilos de fideo, 2 litros de aceite, 1 kilo de sal fina, 2 latas de carne conservada, 2 kilos de harina, 2 kilos de arroz y 2 kilos de coquito es lo que contiene cada kit para 76.000 escolares.