Por Darío Bareiro Fariña
CAACUPÉ
“Los jóvenes tienen un corazón grande, lleno de ideal y son capaces de amar. Es por eso que el Señor Jesús pone su mirada en ustedes porque les necesita, él les quiere ocupar para extender y llevar la palabra de Dios a la gente. Los jóvenes y nosotros estamos llamados a mantener viva la memoria de nuestro pueblo”, afirmó monseñor Joaquín Robledo, obispo de la Diócesis de San Lorenzo, quien tuvo a su cargo la homilía del tercer día del novenario de la Virgen de Caacupé.
El prelado habló en sintonía con la temática de su prédica titulada Los jóvenes, llamados a mantener viva la memoria de su pueblo. Resaltó que esa cualidad ayuda a “no repetir hechos negativos o trágicos del pasado”, al tiempo que permite “construir una sociedad basada en la justicia, en la paz”.
Resaltó que todos están llamados a celebrar el memorial de la eucaristía. “La eucaristía es acción de gracias y es memorial, no simplemente un recuerdo, sino una actualización o vivencia de esa fe”, indicó.
Condenó la violencia cometida contra mujeres y, en especial, los crímenes perpetrados “contra la mujer, niñas violadas, abusadas”.
