Tras su destitución como presidenta de Brasil, el 31 de agosto pasado, Rousseff solo apareció en público en dos oportunidades, precisamente para participar en actos electorales de apoyo a las candidaturas de las diputadas Alice Portugal y Jandira Feghali, ambas aspirantes por el Partido Comunista do Brasil (PCdoB).
Portugal, que era candidata a la alcaldía de la ciudad de Salvador, fue la segunda más votada, con el 14,68 %, en unas elecciones que fueron definidas en primera vuelta ya que el actual alcalde de la ciudad, Antonio Carlos Magalhaes Neto, tenía el 73,91 % de los votos con el 74,47 % del escrutinio concluido.
La votación le garantiza la reelección a Magalhaes Neto, dirigente del partido conservador Demócrata (DEM), sin necesidad de segunda vuelta, prevista por la legislación en las ciudades de más de 200.000 electores en que ninguno de los candidatos obtenga la mitad mas uno de los votos. efe