Schulz realizó este miércoles una visita oficial a Colombia en la que se reunió con el jefe de Estado, Juan Manuel Santos, así como con los presidentes del Senado, Mauricio Lizcano, y de la Cámara de Representantes, Miguel Ángel Pinto.
Durante su visita al Senado dio un discurso en el que aseguró que la UE espera “que el tratado de paz sea firmado pronto” y reiteró el apoyo económico que Europa dará a Colombia para el período de posconflicto que comenzará una vez se firmen los acuerdos de paz.
En este sentido, recordó que el Parlamento Europeo (PE) celebró el nombramiento del enviado especial de la Unión para el proceso de paz, Eamon Gilmore, con quien la cámara “está cooperando estrechamente”.
“También hemos recibido con gran satisfacción la creación de un fondo europeo para financiar acciones (en el) posconflicto para consolidar una paz duradera con más de 70 millones de euros (unos 79 millones de dólares) del presupuesto de la Unión”, señaló Schulz.
Asimismo, celebró “las promesas hechas por varios Estados” de la UE de que contribuirán al fondo con más de veinte millones de euros (unos 22,6 millones de dólares).
Por último, recordó que el Banco Europeo de Inversiones se comprometió a completar la ayuda comunitaria “con un acceso a 400 millones de euros (unos 452 millones de dólares) en préstamos”.
Schulz señaló que para el Parlamento “es importante” que el apoyo de la UE al desarrollo en el posconflicto se extienda a “proyectos independientes defendidos por la sociedad civil”, especialmente los dedicados a la protección de los derechos humanos.
Tras el discurso, Schulz acudió a la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo, donde se reunió con Santos y posteriormente ofreció una rueda de prensa a la que no asistió el jefe de Estado.
El jefe del Parlamento europeo comentó que tuvo con el mandatario una “conversación centrada en el proceso de paz”.
Durante su intervención, ofreció a Colombia la posibilidad de enviar una misión de observadores con “personas muy experimentadas” que pueden ayudar “en la preparación y desarrollo” del plebiscito que debe convocarse una vez se alcance el acuerdo final entre el Gobierno y las FARC.
Esos funcionarios ayudarían a “garantizar la neutralidad, la objetividad y la compatibilidad de un proceso con las normas internacionales”.
Según Schulz, esa misión “puede ser una ayuda para incrementar la confianza” en la consulta popular.
Sin embargo, el presidente de la Eurocámara evitó pronunciarse acerca de las voces que se oponen en Colombia a los acuerdos de paz.
Eso implicaría, en su calidad de representante de la UE, inmiscuirse “en un tema interno” como es la campaña en favor del “sí” o el “no” en el plebiscito.
Pese a evitar pronunciarse de manera directa, sí quiso decir que “lo que se ha logrado en la negociación” de paz entre el Gobierno y las FARC “es notable”.
Asimismo, agregó que este “no es el primer proceso de paz de este tipo que se ha negociado”.
El presidente de la Eurocámara apostilló que al comparar las negociaciones con las FARC con otras que ha conocido, como las que pusieron fin al conflicto de Irlanda del Norte, solo puede decir que el resultado le “parece extraordinario”.
Por último, comentó que desde la UE esperan que este sea un proceso de paz “concluyente, sostenible y duradero” y destacó que en el Viejo Continente creen “que va a ser un acuerdo bueno para el país y la región”.
