“Seguimos comprometidos con una solución negociada de dos Estados, que permanece para nosotros como la única fórmula viable para finalizar el conflicto”, declaró Mogherini en una comparecencia tras la reunión mantenida hoy con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, en Bruselas.
La vicepresidenta de la Comisión Europea explicó que la Unión reconoce los cambios de las fronteras previos a 1967 solo “si son acordados entre las dos partes”, incluidos los que afectan a Jerusalén, y que Bruselas no ha cambiado su posición sobre Jerusalén como capital de los futuros dos países.
“Apoyamos la presencia Palestina en Jerusalén Este en términos políticos y financieros”, añadió Mogherini, convencida de que la actual situación requiere la “fuerte coordinación y unidad” de Palestina e Israel, la región y el conjunto de la comunidad internacional.
La alta representante de la UE para Política Exterior y de Seguridad también recordó la “fuerte oposición” de los Veintiocho a la política israelí de asentamientos y de demolición de edificios palestinos.
“La Unión Europea considera ilegales los asentamientos, de acuerdo con la legislación internacional, y esto tampoco ha cambiado en nuestra política”, precisó.
La política italiana se mostró satisfecha por el interés de la nueva Administración estadounidense en la resolución del conflicto de Oriente Medio e indicó que la paz entre Israel y Palestina se mantiene como “una de las máximas prioridades” del club comunitario.
Asimismo, agradeció a Abás su “liderazgo y compromiso con la no violencia” y sus esfuerzos por mantener el compromiso del pueblo y juventud palestinos con la paz y la cooperación en la región.
“Es un rumbo desafiante, sobre todo, ante un escenario de política y economía en deterioro, pero he asegurado a Abás y a su delegación que la UE está y seguirá estando a su lado para intentar mejorar día a día las condiciones de vida y perspectivas del pueblo palestino”, declaró Mogherini, que este martes asistirá junto con Abás a la cumbre de la Liga Árabe que se celebra en Ammán.
Por su parte, el presidente de la ANP coincidió en señalar la creación de dos Estados basados en las fronteras de 1967 como la única solución y en oponerse a los asentamientos israelíes en Palestina.
Abás se mostró dispuesto a mantener negociaciones de paz con el Gobierno del nuevo presidente estadounidense, Donald Trump.
“He explicado al señor Trump que estamos listos para un acuerdo de paz y vamos a reunirnos en Washington, pues hemos aceptado su invitación”, comentó Abás, quien explicó que la reunión con Mogherini ha servido para “encontrar los mejores caminos hacia una solución equitativa, exhaustiva, permanente y duradera bajo el liderazgo de Trump”.
Sobre la creación de dos países, subrayó su compromiso con una solución “justa” basada en la “legitimidad internacional, las resoluciones internacionales del Consejo de Seguridad de la ONU y las iniciativas árabes” y afirmó que Palestina desea establecer su capital en Jerusalén Este.
“Queremos que sea una ciudad abierta a todos los creyentes de todas las sagradas religiones”, detalló el presidente de la ANP, quien añadió que los asentamientos israelíes no llevarán la paz a la región e insistió en su intención de mantener una relación de “buenos vecinos” con Israel.