Victor Sostoa
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Para tratar de ser criterioso hay que separar los argumentos de análisis. Por un lado, está la diferencia de uno y otro equipo y, por otro, la actuación desastrosa del árbitro Andrés Cunha, que en la mayoría de las divididas pitó a favor de los visitantes.
River llegó a este partido con tres bajas importantes (todos ellos de perfil defensivo), pero en contrapartida hizo uso de la posibilidad de modificar la lista de buena fe y se reforzó de buena manera y no se resintió. Sin embargo, Guaraní se debilitó con la salida de Néstor Camacho y no realizó incorporaciones para paliar el déficit, especialmente de mitad de cancha para adelante.
MEJOR PLANTEL. La diferencia de jerarquía se hizo notaria rápidamente. Antes de los cinco minutos de juego, los visitantes ya predominaron en el juego, con una marcada supremacía en campo antagónico. Gallardo eligió que su equipo ataque por el sector izquierdo de la defensa aurinegra, donde la ausencia de un marcador lateral de oficio facilitó el despliegue de Moreira, Martínez y Scocco, quienes armaron una sociedad muy ambiciosa y desequilibrante. Antes del gol del ex Newell’s, García tuvo un mano a mano con el golero Batalla y el atacante eligió la potencia y ganó el arquero. Muy poco para un equipo local, que aspira seguir avanzando en Copa.
Al promediar el segundo tiempo, los cambios de Garnero y las ansias de empatar hicieron que Guaraní genere aproximaciones hacia el arco de Batalla, pero García, el que tuvo las mejores posibilidades, no estuvo certero.
La figura
Leonardo Ponzio
El volante de River ganó en toda la noche. No se cansó de recuperar balones y auxiliar a los extremos. Cuando tuvo la pelota también fue claro en la entrega. En Guaraní, el defensor Robert Rojas tuvo un desempeño correcto.
Van por 950 mil dolares, al jugar el partido de octavos de final en calidad de local, recibe USD 750.000. En caso de avanzar a los cuartos de final, el Aborigen recibirá otros USD 950.000. Hasta el momento el conjunto Legendario tiene acumulado USD 2.550.000.
La vuelta
El encuentro de vuelta entre legendarios y millonarios por el pase a los cuartos de final de Libertadores será el próximo martes 8 de agosto, en Buenos Aires, desde las 20.45, en el estadio Monumental de Núñez.
Auntoque
Buen control. Los tres anillos de control que dispuso la Policía Nacional fueron muy efectivos. Gente alcoholizada, sin entradas y sin documentos no pudieron sobrepasar esos dispositivos, sumada a la gran cantidad de efectivos.
Pocos portones. Lo criticable fue la falta de portones habilitados para el ingreso de los aficionados. Un solo acceso habilitado en Preferencias para los locales y uno para los visitantes. Lo mismo sucedió en el sector de Plateas. Esto hizo que el ingreso sea lento y ponga nerviosos a hinchas.
De la B. Todo lo que se habló en la previa, el cruce de acusaciones entre los protagonistas se trasladó en las gradas. Los hinchas de Guaraní calentaron la noche con el cántico “Vos sos de la B” haciendo alusión al descenso de River. No tardó la respuesta de los argentinos, quienes entonaron el “Y ya lo ve y ya lo ve, somos locales otra vez”.
Apagón. Tras el tanto de Scocco, las luces de Preferencias se apagaron, motivo por el cual el partido se interrumpió desde los 36' durante 10'. No es la primera vez que pasa.
Insultos. Durante el apagón, los hinchas de Guaraní de Preferencias subieron hasta donde estaba ubicado el presidente de River, Rodolfo D’Onofrio, a quien insultaron e hicieron gestos de sobornos.
18 al DÓPING. En insólito e histórico caso, los 18 jugadores de River debieron pasar por el control antidopaje tras recibir una notificación de la Conmebol. Dos jugadores de River dieron positivo en esta Copa, lo que había generado una previa calentita y polémica que incluyó una pelea del Chila, ayer, con hinchas millonarios.