La Policía Federal brasileña, tras concluir la respectiva investigación, igualmente recomendó que sea imputado por corrupción y lavado de dinero el empresario Marcelo Odebrecht, expresidente del gigante grupo Odebrecht y que está preso por su implicación en el escándalo de corrupción de la petrolera Petrobras, según el portal Estado de Sao Paulo.
Las recomendaciones de la Policía Federal serán analizadas por la Fiscalía, que deberá decidir en un plazo de 90 días si formula cargos contra ambos.
Las conclusiones de la Policía fueron anunciadas luego de que el Superior Tribunal de Justicia (STJ) autorizara la imputación de Pimentel, ya que el dirigente del Partido de los Trabajadores (PT) tiene fuero privilegiado por su condición de gobernador de Minas Gerais.
Las investigaciones forman parte de la llamada Operación Acrónimo, que investiga supuestos desvíos de recursos públicos para financiar la campaña electoral con la que Pimentel fue elegido gobernador en octubre de 2014.
Pimentel, que fue ministro de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior en el primer mandato de Rousseff, es un importante colaborador y amigo personal de la mandataria, y líder del PT en Minas Gerais.
De acuerdo con la investigación, cuando aún formaba parte del Gabinete de Rousseff, Pimentel habría autorizado al estatal Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) financiar proyectos de la constructora Odebrecht en el exterior.
Según declaró Benedito Rodrigues de Oliveira Neto, propietario de una empresa que prestó servicios para la campaña de Pimentel y que colaboró en la investigación a cambio de una reducción en su condena, a cambio de la financiación del BNDES Pimentel recibió de Odebrecht 12 millones de reales (3,64 millones de dólares) en efectivo para financiar su campaña electoral.
En octubre de 2015, la Policía Federal llevó a cabo una serie de registros en algunas importantes empresas que obtuvieron créditos del banco de fomento, entre las que se encontraban, además de Odebrecht, la productora cárnica Mafrig, la red de supermercados Casino y la constructora Camargo Correa.
Además de haber recibido préstamos del BNDES, las empresas registradas tienen en común el haber hecho pagos para firmas publicitarias que repasaron recursos para la OIL Comunicação, una prestadora de servicios de propiedad de la periodista Carolina Oliveira, esposa de Pimentel.
Consultado por Efe, el STJ rehusó comentar el caso por encontrarse bajo secreto de sumario.
La Operación Acrónimo se inicio en octubre de 2014 cuando la Policía Federal se incautó de 116.000 reales (unos 35.000 dólares) en efectivo en un avión de propiedad de Rodrigues de Oliveira que aterrizó en Brasilia y que presuntamente transportaba recursos para una campaña electoral.
