Haley, que durante la campaña electoral dejó claras sus diferencias con Trump, se perfiló durante su audiencia de confirmación en el Senado como una voz independiente que tratará, junto a otros miembros del gabinete, de moderar al presidente en algunas de sus posiciones más controvertidas.
“Yo voy a comunicarle lo que pienso, y sé que el resto (del equipo) de seguridad nacional lo hará también”, aseguró Haley ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos.
“La OTAN ha sido, claramente, una alianza que hemos valorado, y tenemos que seguir apoyándola. Espero que a medida que hablemos con él sobre estas alianzas y la forma en la que pueden ser de ayuda y pueden ser estratégicas, creo que nos escuchará, y ojalá podamos conseguir que lo vea del mismo modo que nosotros”, añadió.
En dos entrevistas con medios europeos el pasado fin de semana, Trump insistió en que la OTAN está “obsoleta” y pronosticó que, además del Reino Unido, más países abandonarán la Unión Europea (UE) por considerar que “básicamente un vehículo para Alemania”.
La senadora demócrata Jeanne Shaheen mostró durante la audiencia su preocupación por esas declaraciones de Trump, y por las críticas que el presidente electo estadounidense ha dirigido a la canciller alemana, Angela Merkel.
Haley dijo al respecto que Trump está “tratando de ver qué relación puede tener con los diferentes líderes” del mundo.
Después de que Haley expresara su apoyo a alianzas como la OTAN y defendiera la necesidad de ser firmes con Rusia, el senador demócrata Chris Murphy le replicó que muchas de las posiciones de Trump eran “exactamente lo contrario” de las suyas.
“No todas (las posiciones polémicas de Trump) cambiarán después de (que tome posesión de su cargo el) viernes, pero yo controlaré la parte que pueda” desde el puesto de embajadora ante la ONU, prometió Haley.
“Los Gobiernos funcionan así, no te rodeas de gente que solo te diga que sí. Y lo que yo sé sobre el presidente electo es que nos va a escuchar”, añadió.
Cuando el senador demócrata Cory Booker le dijo que esperaba que ella fuera “una de las voces independientes que hablarán claro” a Trump, Haley respondió: “sí, lo seré”.
La candidata a la ONU, de 44 años, ha sido gobernadora de Carolina del Sur desde 2011 y durante las primarias republicanas respaldó a un rival de Trump, el senador Marco Rubio, y recibió críticas del ahora presidente electo, quien en marzo pasado aseguró que el estado que gobernaba estaba “avergonzado” de ella.
Aunque no tiene experiencia en política exterior, Haley defendió que llevará a la ONU las dotes de gobierno que ejercitó al frente de su estado, y no despertó demasiadas objeciones entre los senadores en la audiencia, por lo que no parece que vaya a tener problemas para ser confirmada.