Marcial Gómez, dirigente de la Federación Nacional Campesina (FNC), explicó que consideraron oportuno centrar la movilización en la histórica exigencia de la reforma agraria, pero con el agregado del pedido de paz, teniendo en cuenta la seguidilla de atropellos a los asentamientos campesinos.
Gómez recordó los casos de Guahory y Marina Cué como los más emblemáticos. “Nuestra posición es clara contra cualquier desalojo de las comunidades, porque varios están ocurriendo con mucha violencia. Los pequeños productores en asentamientos campesinos viven en zozobra permanente por este motivo”, explicó el dirigente campesino.
Así también resaltó la violencia con la que se actúa contra las mujeres y los niños inclusive, como ocurrió hace apenas una semana en Obligado, Departamento de Itapúa.
Itinerario. Los campesinos saldrán a las calles el 28 de marzo, en sus distritos. Durante la mañana, realizarán varias actividades en las cabeceras departamentales para luego alistarse y venir a Asunción en horas de la tarde. El punto de encuentro será el predio del ex Seminario Metropolitano.
El miércoles saldrán a las 7.30. Marcharán por las siguientes avenidas y calles: Kubitschek, Eusebio Ayala, General Aquino, Azara y 14 de Mayo, hasta la Plaza de Armas, frente al Congreso Nacional.
Se espera reunir a más de 7.000 campesinos, y superar así la cantidad del año pasado. Creen que podrán hacerlo, porque este año se unen a la marcha los bañadenses y los estudiantes, comentó. Como previa, ayer se manifestaron frente a la Asociación Rural del Paraguay (ARP). “(Los ganaderos) usan al Estado paraguayo para reprimir”, denunció Gómez.