Por Gustavo A. Olmedo B.
“En Trinidad y Tobago, cuando un señor se acerca a entregarme un programa original de la visita de Barrios de 1936 entendí lo que significó para ellos: nadie atesora un programa por tantos años si esa música no te hubiera tocado el corazón”. Con este relato, Berta Rojas explica el valor que fue descubriendo durante la gira Tras las huellas de Mangoré, con la que difundió la vida y obra del gran Agustín Pío Barrios (1885-1944), y que mañana llega a su final en el Teatro Nacional de El Salvador, nación que guarda los restos mortales del genial músico compatriota.
Un recorrido artístico calificado como “mágico” por la guitarrista, a través del cual no solo realizó el mismo circuito de Barrios en sus presentaciones -unos 20 países-, sino que también “pudo acercarse” a sus vivencias. “Viajar toda la América, difícil y cansador como es hoy, ha sido mil veces más para Mangoré. Quizás en Venezuela, cuando perdí un vuelo y terminé viajando casi 24 horas por tierra y llegué al recital apenas con tiempo para tocar, haya sido la experiencia más cercana a lo que él vivió. Después de este recorrido, solo puedo respetarlo más como pionero que fue de la guitarra clásica en las Américas”, dice.
Al evaluar la gira, la guitarrista paraguaya nominada este año por segunda vez a los Grammy, asegura que Mangoré dejó huellas profundas “en tanta gente” en su paso. “Jorge Drexler me dijo en una carta: ‘Barrios conoció su tierra y su tiempo como nadie’, y es así. Al transitar este camino sentimos que su legado está más vivo que nunca. Ahora en El Salvador se está preparando una orquesta de jóvenes que acompañarán con la Danza Paraguaya el gran cierre de la gira. Situaciones de hermandad como estas las vivimos a lo largo de toda la gira, que ha sido un modo maravilloso de hablar de Paraguay”, afirma.
proyectos. Berta opina que la música de Mangoré habla por sí misma. “Es belleza pura. Hay que dejarla sonar nomás y la magia se produce”. Comenta que en la combinación con Paquito D’Rivera lograron sacar del nicho de la guitarra clásica y proyectar a Mangoré y a la música paraguaya hacia un público más amplio. “Transmitimos música, anécdotas de la vida de Barrios y sobre todo hablamos de Paraguay en algunos de los más respetados escenarios de las Américas”, apunta.
Berta mira para adelante, y señala que tras este tributo a Barrios pretende dar un paseo por la geografía musical de las Américas, empezando por Argentina, para adentrarse en la música de Piazolla y otros creadores de la mano de Carlos Fransetti. “Como la música de esta tierra grande es la que más me apasiona, quiero adentrarme en ella, quizás incluso tomarme un año sabático para estudiar y vivir la música de distintos lugares que voy descubriendo en estos viajes. Hay muchísimo para contar en discos, de la paleta sonora de las Américas”, culmina la exitosa guitarrista.