Hasta el momento, 53 soldados ya han sido detenidos en la operación que las fuerzas de seguridad turcas han emprendido en 57 provincias del país, informó la agencia Anadolu.
Los soldados están acusados de usar “ByLock”, una aplicación móvil presuntamente desarrollada para permitir una comunicación cifrada entre los miembros de la cofradía de Gülen.
La prensa turca ha señalado que unas 55.000 personas en Turquía usaban “Bylock” y todas ellas son sospechosas de pertenecer a la red de Gülen.
Desde la intentona golpista, las autoridades han detenido o suspendido de sus empleos a miles de policías, militares, jueces, profesores y funcionarios de distintas oficinas públicas, acusados de ser seguidores de Gülen.