Según la FAO, la agroecología promueve el círculo virtuoso entre la producción de alimentos saludables y la protección de los recursos naturales.
“La agroecología debe convertirse en una parte importante de las estrategias de erradicación del hambre de los países de América Latina y el Caribe”, señalaron algunos de los participantes del Seminario Regional sobre Agroecología que se realizó en la capital de Brasil esta semana.
El evento contó con la participación de asociaciones de productores, mujeres, jóvenes y pueblos indígenas. Estos manifestaron que la agroecología debe ser incorporada a las políticas nacionales y regionales de desarrollo sostenible y lucha contra el hambre.
La FAO destacó que algunos países de la región, como Cuba, Bolivia, Nicaragua y Ecuador desarrollaron marcos de política de desarrollo rural agropecuario.
Dominicana por su parte anunció durante el seminario su plan de transformar toda la producción agrícola en la isla a producción orgánica en 10 años.
La agroecología permite proteger la biodiversidad y rescatar los productos locales, estimula el desarrollo de circuitos cortos de agricultura y nuevas oportunidades para el desarrollo de los territorios rurales y de la agricultura familiar, los cuales promueven una mejor calidad de vida tanto para productores como consumidores, generando alimentos más saludables.