La empresa explica la mejora en la buena evolución de los negocios y la reducción de los gastos operativos y financieros.
El beneficio bruto de explotación o ebitda aumentó un 4,2 %, hasta los 5.729,5 millones de euros (6.249 millones de dólares).
Sin tener en cuenta el efecto del tipo de cambio, la eléctrica señala que el incremento en el ebitda sería del 6,7 %.
Respecto a los ingresos, cayeron un 9 %, afectados por el tipo de cambio con devaluaciones de la libra esterlina y el real brasileño.
Por negocios, el ebitda de Redes aumentó un 8,6 %, mientras el de Generación y Clientes disminuyó un 0,1 % y el de Renovables bajó un 3,3 %.
En cuanto a su filial Avangrid, participada en un 81,5 % por Iberdrola y que cotiza en la Bolsa de Nueva York, obtuvo un beneficio neto de 404 millones de dólares en el periodo, un 45 % más.
La compañía española destaca que hasta septiembre aumentó sus inversiones un 45 % respecto al mismo periodo del año anterior y continuó generando empleo con casi 2.000 contrataciones en lo que va de año.
De las inversiones, un 64 % las destinó a crecimiento y un 91 % a negocios regulados o con contratos a largo plazo.
Respecto a la deuda financiera neta, se situó en 28.418 millones de euros (31.000 millones de dólares), 2.259 millones de euros más que en septiembre de 2015 por la consolidación de la estadounidense UIL.