Mazella, quien dirigió la investigación que condujo a Ibar al banquillo de los acusados por tres asesinatos, ocupó hoy el estrado en una nueva audiencia preparatoria del juicio al que debe ser sometido el español tras la anulación de su condena a muerte en el año 2016.
El detective fue interrogado en primer lugar por el abogado Fred Haddad, integrante de la defensa, y posteriormente lo será por un representante de la Fiscalía en presencia del juez Raaj Singh.
También asistió Ibar, quien contó con el apoyo de sus familiares como sucede en cada comparecencia que debe hacer en los tribunales de Fort Lauderdale, al norte de Miami.
Haddad le preguntó insistente e incisivamente al detective sobre los procedimientos que la policía aplicó para que Gary Foy identificara a Ibar como una de la personas que vio saliendo de la casa de una de las víctimas al día siguiente de los asesinatos.
La defensa, que se ha apoyado en las opiniones de un psicólogo especializado, Ronald Fisher, mantiene que la policía vició intencionadamente o no la identificación con unos procedimientos anómalos.
Por eso ha pedido al juez que el testimonio de Foy en el juicio anulado por la Corte Suprema de Florida en 2016 no sea tenido en cuenta en el nuevo, para el que aún no hay fecha.
Mazella tardó en responder en varias ocasiones y en otras contestó de manera dubitativa o diciendo que no se acordaba ya, pues los hechos sucedieron en 1994.
Uno de los asuntos en los que más hincapié ha hecho la defensa es que a Foy se le presentaron seis fotografías para que identificara al individuo que vio salir de la casa de Casimir Sucharsky.
Dos de las personas fotografiadas, una de ellas Ibar, aparecían mal afeitados, lo que a juicio de Fisher condicionó la identificación por parte de Foy.
El detective no pudo responder cuando se le preguntó por qué se hizo así.
Foy no hizo una identificación al 100 % con las fotografías y aunque se quedó con las fotografías de los dos mal afeitados, pero dijo no estar seguro de cuál era el que él vio.
Por eso fue llevado posteriormente a una rueda de reconocimiento, donde sí escogió a Ibar, quien hoy estaba con una barca recortada y cuidada y traje gris y camisa blanca.
Ibar, quien lleva preso desde 1994 y pasó 16 años en el corredor de la muerte, espera el nuevo juicio en prisión preventiva.
Las víctimas de los asesinatos fueron Casimir Sucharsky, dueño de un club nocturno, y las modelos Sharon Anderson y Marie Rogers.
