En un comunicado difundido por la agencia oficial saudí de noticias, SPA, la alianza contabilizó un total de 205 violaciones del alto el fuego presente en el país en territorio saudí, 124 de ellas en la región de Yazán y 81 en la de Nishrán, ambas en la frontera sur con el Yemen.
Por otra parte, en territorio yemení, la coalición denunció un total de 692 violaciones a la tregua cometidas por los hutíes: 124 en la región de Maareb (oeste), 24 en Shebua (sureste), 265 en Taiz (sur), 44 en Al Dalaa (sur), 48 en Heya (noroeste), 116 en Al Yuf (noroeste), 25 en Sanáa, 41 en Al Baida (centro) y cinco en Aden (sur).
Según el liderazgo de la alianza, las milicias hutíes utilizaron en sus ataques distinto tipos de armas, entre ellas misiles, proyectiles e incluso disparos de francotiradores.
La coalición respondió a esos ataques “según las bases del conflicto”, según la nota.
La ONU, EEUU y el Reino Unido propusieron la actual tregua, que entró en vigor a la medianoche (20.59 GMT) del miércoles al jueves y está previsto que finalice esta noche, después de que la coalición bombardeara una ceremonia funeraria en Saná, y causara 140 muertos y 525 heridos, el pasado día 8.
La alianza militar de países árabes y suníes empezó su campaña militar contra los rebeldes chiíes en marzo de 2015, lo que hizo que el conflicto interno se recrudeciera considerablemente.
Este es el sexto alto el fuego anunciado en el Yemen desde el comienzo de esa intervención y durante este tiempo la ONU ha auspiciado conversaciones de paz para tratar de llegar a una solución negociada, sin obtener resultados.
Tanto las treguas sobre el terreno como las rondas del diálogo político han fracasado hasta el momento.