Fernando Rodríguez empezó a utilizar su bicicleta para ir al trabajo hace unos 7 meses. La usa para recorrer a diario 3 kilómetros de ida y vuelta a su trabajo en el centro de Asunción. Manifiesta a ÚLTIMAHORA.COM que el único problema que al menos él vio es que su lugar de trabajo no está preparado para guardar su biciclo.
Sostiene que gente que él conoce que también utilizan las dos ruedas para ir al trabajo tienen las ganas “pero no hay infraestructura”, así como tampoco hay bicisendas. Un ciclista al salir a la calle para ir a trabajar o siquiera pasearse tiene que lidiar con las motos, los automóviles y colectivos.
Uno de los aspectos que resalta Rodríguez es que si bien no bajó de peso, que es lo que muchos a lo mejor buscan, bajó su colesterol, que estaba en altos números.
Andrea Santander es arquitecta y vive en el microcentro de Asunción. Después de mucho buscar consiguió una bicicleta a su gusto, freno contrapedal, marca Monark, modelo antiguo, en marzo de este 2014. Señala que la pasa “muy mal” al salir a pasear en su biciclo.
“Te gritan de todo, los conductores de vehículos no te respetan, tipo sos una molestia y terminás andando por la vereda”, relata. Aunque luego se las rebusca para seguir paseando por la ciudad. Andrea busca calles alternativas donde “no haya mucho tránsito y que no tengan tantas pendientes (risas)”. Dice que en Encarnación andar en bici le resultaba “muy tranquilo”.
Rodríguez por su parte con un grupo de amigos armó Bicicentro y desde hace 2 años se juntan los lunes, miércoles y viernes a recorrer el microcentro. Aunque también hacen viajes a ciudades aledañas.
Aparte con Bicicentro buscan que los participantes se relacionen entre todos así conocen personas y establecen nuevos vínculos a través de esta “actividad recreativa”. Sin embargo “falta acción” por parte de las autoridades porque las intenciones ya están.
Santander abogó por una bicisenda antes que el respeto al ciclista porque el carril exclusivo no lo puede hacer ella sola.
Igualmente los ciclistas deben cumplir las normas de tránsito. El jefe del Departamento Operativo y Tránsito, Gustavo Cardozo, explica que “todo vehículo que utiliza las vías públicas tiene que adecuarse a las normas de tránsito”.
Para las bicicletas, triciclos y similares sin motor rige la ordenanza 479, del Reglamento General de Tránsito. Entre las disposiciones están la utilización de casco y chaleco reflectivo, circular a un metro del cordón y en línea, a no ser que se habilite un carril exclusivo, avisar cuando se realizará un giro y respetar los semáforos. Tampoco pueden circular por las veredas.
Cardozo indica que hasta el momento no hay sanciones a pesar de que la ordenanza lo establezca, pero que las normas que rigen son para “seguridad del ciudadano”. Además adelanta que la Municipalidad está buscando abrir más espacios para los ciclistas.
Hay un proyecto para habilitar carriles exclusivos en el barrio Trinidad, además que hay bicisendas en algunas zonas como 21º Proyectada y Yegros.
Además Cardozo recuerda que la Comuna cuenta con una escuela de Educación vial para los interesados en aprender las normas de tránsito. Se trata de la Academia de la Policía Municipal de Tránsito. Dan cursos sin costo, coordinando con los encargados de la institución.
Suelen dar clases a alumnos sobre las normas de tránsito. Cuenta con un programa completo para poder despejar las dudas de aquellos que quieran conocer las reglas para poder circular por Asunción.
También la empresa Cyclesport tiene una Escuela de Ciclismo que funciona desde fines del 2012. Allí ofrece clases de reglas viales, de conducción y técnicas para mountain bike. Está dirigida por Roberto Menéndez, ciclista reconocido a nivel internacional.
Pero la empresa ofrece asesoramientos también a aquellos interesados en adquirir una bicicleta, según María Fernanda Núñez, de Cyclesports.
Las clases son los lunes, miércoles y viernes. Además suelen realizar cursos para aprender a arreglar bicicletas. “La empresa intenta enseñarles sus derechos a los ciclistas y también sus obligaciones”, manifiesta.
“No es cómodo andar en bici en esta ciudad (Asunción), pero no por eso voy a dejar de hacerlo”, sostiene Andrea Santander. Las pendientes son una incomodidad para aquellos que usen una sin cambio pero tampoco un impedimento para hacerlo.
