El guardameta costarricense acudió junto a su mujer, Andrea Salas, a un acto para presentar la línea de joyas solidarias Duran Exquse. Keylor Navas y su esposa la promocionan en beneficio de la Fundación Querer con el objetivo de conseguir financiación para abrir un colegio para niños con trastornos del lenguaje.
El meta del club madridista reconoció estar en un gran momento personal. Su último éxito, frente al Atlético de Madrid, llegó después de evitar un gol tras frenar al francés Kevin Gameiro en un mano a mano.
“Estoy muy contento, estoy en un gran momento de mi vida, tengo salud, tengo familia y tengo muchas cosas. Y, ahora, podemos ayudar a muchos niños”, dijo.
“El objetivo principal es construir un colegio donde van a poder asistir niños con problemas de habla, autismo y epilepsia. La idea es que con la línea de joyas se recaude dinero vaya a beneficio de construir un colegio”, agregó.
Navas, que no quiso responder a preguntas de índole deportiva, reconoció que al ser una persona conocida tiene el “privilegio” de poder ayudar a que se lleven a cabo causas benéficas.
“Es súper bueno. Y gracias a todos que están aquí. Sois el medio que para que esto pueda llegar a las casas y a todo el mundo. Es un proyecto bonito y va a hacer a muchas familias felices”.
Su mujer, Andrea Salas, comentó que la mejor joya que le ha regalado Keylor Navas es el hijo que tienen en común. Después, el portero del Real Madrid desveló cuál es el secreto para vivir un matrimonio feliz.
“Lo primero es tener a Dios en el corazón. Es lo más importante. Eso nos lleva a tener muchos valores. Siempre tratamos de tenerle presente, de respetarnos mutuamente y de respetar nuestro espacio. Es lo que soñaba cuando estaba soltero. Lo conseguí y por eso estoy feliz”.
