El disparo ingresó por el costado izquierdo del cuerpo, lo que provocó la perforación de ambos pulmones y la destrucción de una parte del hígado. “Él termina falleciendo por una asfixia y una hemorragia interna”, indicó Lemir, quien además resaltó que no se registraron impactos en la cabeza, como se había dicho al principio.
Además, acotó que se cuenta con placas radiográficas que fueron sacadas al cuerpo antes de extraer la evidencia colectada.
Añadió que solamente fueron extraídos siete perdigones de metal, debido a que los otros dos estaban muy profundos y se tenía que abrir demasiado el cuerpo.
“Las siete están individualizadas con número de causa, y ya se les proveerá al Departamento de Balística del Ministerio Público, quienes podrán posteriormente corroborar el número de calibre, así también a que distancia se realizaron los disparos”.
secuencia de videos. Lemir mencionó que es muy importante la secuencia de video del circuito cerrado incautado en la sede del PLRA.
“Con este video se podrá realizar la reconstrucción de los hechos, porque valga recordar que los disparos de escopeta no tienen estrías, es decir, la munición, por lo que no es posible decir de esta arma se disparó, solamente se podrá corroborar con el video”, resaltó.
La fiscala Raquel Fernández solicitó la autopsia para conocer la verdad de los hechos y determinar los responsables del mismo.
“El doctor Lemir realizó un trabajo bastante minucioso y efectivo que me ayudará a poder tener un mejor panorama. Son datos fundamentales que solo el especialista técnico en medicina forense lo podía realizar”, finalizó.