De a poco Capiatá recupera la sonrisa y la memoria en el campeonato. Este domingo, en condición de local, volvió a la victoria tras vencer a Guaraní por 1-0. Sin embargo en la previa a la octava fecha, las cosas en el club no eran del todo color de rosa. Resulta que los resultados no acompañaban y por si fuera poco, en la práctica de fútbol del jueves, Jorge Paredes y Junior Marabel tuvieron un encontronazo en la cancha.
El primero, quien practicamente hizo toda su carrera profesional el club, habría golpeado al juvenil y posteriormente protagonizó una discución con el entrenador. Lo que le valió su separación del plantel principal.
No obstante Gavilán minimizó lo ocurrido con el defensor y en contacto con Fútbol a lo Grande declaró: “El ambiente es muy bueno, de ninguna manera negativo ni tenso. El plantel está bien. Hay una decisión tomada del cuerpo técnico y todo permanece igual (Separación de Paredes). Ustedes saben mejor que nadie.
“Tengo el respaldo del presidente y la comisión directiva. El día que ya no lo tenga, no seguiré en el club”, agregó el Pampero.
Por otro parte, al respecto del encuentro ante el último campeón, Gavilán apreció la victoria, la misma fue prácticamente un esperado desahogo. “Estas últimas semanas han sido muy difíciles, principalmente por la seguidilla de derrotas, por cómo se dieron. Creo que las últimas dos no la merecíamos, otras sí”.
“Sabíamos que iba ser un partido con posibilidades tanto para ellos como para nosotros. Sabíamos que teníamos que estar compactos y aprovechar las oportunidades que tengamos. Tuvimos una que la pudimos concretar por fin”, sentenció el DT.
Por la novena fecha del Apertura, Capiata visita el miércoles al Sportivo Trinidense en el Martín Torres, desde las 19.00.