La gavilla de al menos 20 delincuentes, con uniformes camuflados y fusiles, se alzó con G. 1.000 millones al reducir a tiros a seis funcionarios y dos policías en el kilómetro 50 de la supercarretera.
Los agentes de Investigación de Delitos revelaron ayer que el golpe fue craneado y dirigido desde la cárcel regional, donde está recluido Carlos Zeballos Bogarín, alias Carlos Rico, integrante de la gavilla de Amado Ramón Benítez, quien se encargó de contactar con los marginales que ejecutaron el golpe millonario. El mototaxista era el nexo entre Carlos Rico y el jefe de seguridad de la casa de cambios, quien informó de la salida del transportador desde Ciudad del Este con destino a San Alberto, según los investigadores.
La Policía informó que la gavilla estaría integrada por miembros del PCC y remanentes de la gavilla de Benítez, recluido actualmente. La fiscala Estela Mary Ramírez dictó captura solamente contra Mauricio Paniagua Medina como uno de los autores materiales, hasta ayer.
Mientras que el hermano de este, Eliodoro Paniagua Medina, se presentó ante la fiscala a través de su abogada, Jacquelina Álvarez; según su versión, estuvo en su casa, en el barrio San José de Hernandarias, durante todo el día, el lunes último. El mismo guarda prisión domiciliaria por un caso de doble homicidio. (E. M.)