Así lo afirmó durante una conferencia en San Juan, donde está hoy de visita para reunirse con seguidores del Partido Republicano en Puerto Rico y recaudar entre ellos apoyos y fondos para sus aspiraciones políticas.
Además, el político conservador participó en la charla “Oportunidad económica: derecho a superarse”, organizada por la Biblioteca Luis Fortuño de la Universidad Metropolitana” en una apretada jornada en San Juan que finalizará esta misma tarde.
Bush, hijo y hermano de sendos presidentes de EE.UU., aseguró que todavía no ha decidido si se presentará a la carrera interna en el Partido Republicano por ser el candidato en las elecciones estadounidenses de 2016.
Durante la citada conferencia de prensa, el que pudiera convertirse en el tercer Bush que ocupa la Casa Blanca subrayó que los latinos ganan peso, paso a paso, en la sociedad estadounidense gracias a la educación de los más jóvenes, que, con el acceso progresivo a la universidad, consiguen incorporarse a la clase media.
Bush, que como recordó viajó por vez primera a Puerto Rico en 1980 para colaborar en la campaña de su padre, dijo que EE.UU. necesita mano de obra, tras matizar que la llegada de nuevos trabajadores que se incorporen a la sociedad estadounidense debe hacerse por medio de políticas migratorias “ordenadas”.
“Se debe crear una estrategia migratoria”, dijo en relación a la llegada de inmigrantes a EE.UU., en su mayoría latinos.
El político dijo que la sociedad estadounidense ha cambiado en las últimas décadas y que una buena muestra es su propia familia y sus hijos, a los que definió como el resultado de una fusión, ya que su esposa es de origen mexicano.
Bush insistió en que la llegada de nuevos trabajadores a EE.UU. debe hacerse siempre bajos las condiciones de la inmigración legal, ya que “es mejor y crea mejores empleos”, lo que a su vez ayuda al crecimiento económico, algo que, según dijo, el actual presidente, Barack Obama, ha dejado de lado.
Según sus cálculos, la única forma de que EE.UU. vuelva a registrar una etapa expansiva es que crezca al menos a un ritmo del 4 % anual, el doble de la cifra actual.
Para ello apostó por las alianzas público-privadas y las obras públicas, como se hizo en Puerto Rico durante el mandato de Luis Fortuño, el exgobernador que hoy hizo de anfitrión.
Criticó la política internacional de Obama y dijo que es absolutamente necesario que EE.UU. vuelva a ganar peso en el mundo, algo que en su opinión es garantía de cierta estabilidad internacional.
El político, que próximamente tiene previsto viajar a Europa, apostó por reforzar la relación con Europa como base de esa estabilidad mundial, en especial con Alemania, país al que definió como el mejor socio de EE.UU. en el Viejo Continente.
La agenda de Bush en Puerto Rico, que hoy mismo abandonará la isla, incluye un encuentro con seguidores del Partido Republicano en Bayamón, localidad del área metropolitana de San Juan, y un acto de recaudación de fondos.
