“En diez años, Paraguay aumentó el uso de energía a tal punto que para 2023 no tendrá excedente que vender. El aumento responde al consumo residencial. Si la energía excedente paraguaya fuera utilizada en la industria, entonces se podría estimular una transición energética y un crecimiento económico sustentable y sostenible”, manifestó Christine Folch, profesora del Departamento de Antropología Cultural de la Universidad de Duke e investigadora principal del documento denominado Itaipú Pos 2023: Inversión estratégica para el desarrollo del Paraguay.
En vez de depender de los impuestos, los gastos corrientes estatales también son pagados con los beneficios de la represa, debilitando la posibilidad de generar un desarrollo sustentable y sostenible, añade el reporte de los especialistas extranjeros
FUTURO. Además, el desgaste por uso y sedimentación del río volverá inoperante la usina, lo que obligará a reemplazar la energía y los ingresos de Itaipú en el futuro, agrega.
Faltan seis años para que se cumplan 50 años de la entrada en vigencia del Tratado de Itaipú y, a la par, la hidroeléctrica cancelará su histórica deuda con Eletrobras, por lo que se abrirá un nuevo escenario económico para Paraguay. Se deberá negociar con Brasil qué se hará con los recursos extras que queden y la nueva tarifa de venta de energía.