En declaraciones a la agencia oficial iraní IRNA desde Nueva York, donde participa en la conferencia de revisión del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNPN) y donde tiene previsto continuar las negociaciones con representantes del G5+1, Zarif insistió en la “responsabilidad” de Washington de aplicar cualquier pacto pese a la oposición en su país.
Así, Zarif se refirió a las corrientes que dentro del Congreso estadounidense abogan por no apoyar un acuerdo nuclear con Irán y quieren obligar al presidente de EEUU, Barack Obama, a contar con su aprobación para poder levantar las sanciones que pesan sobre el país asiático.
“El Gobierno de EEUU es responsable de aplicar cualquier acuerdo, y sus luchas internas no nos conciernen. De acuerdo a las leyes internacionales, los problemas domésticos de un país no lo eximen de sus compromisos”, insistió.
En cualquier caso, Zarif, que hoy mismo tiene previsto reunirse con su homólogo estadounidense John Kerry, apuntó que durante sus negociaciones Irán espera “escuchar claras explicaciones de los funcionarios estadounidenses sobre sus disputas internas y sobre el probable papel que tendrán en la aplicación de un acuerdo nuclear”.
Respecto al acuerdo en sí, el jefe de la diplomacia iraní insistió que para su país es inconcebible que haya un pacto y permanezcan las sanciones.
Para Zarif, “todas las sanciones deberán ser levantadas de forma simultánea con la aplicación de un acuerdo”, tal y como quedó recogido en el acuerdo marco anunciado por Irán y el G5+1 (EEUU, China, Francia, Reino Unido, Rusia y Alemania) en Lausana, Suiza, el pasado 2 de abril.
Esta interpretación iraní del acuerdo, del que no hay una versión oficial, ha sido fuente de polémica entre Irán y EEUU desde el anuncio, ya que para Washington el fin de las sanciones sobre Irán debe ser gradual y realizarse en función del cumplimiento que Teherán haga del pacto.
El pasado viernes culminó en Viena, Austria, la primera ronda de diálogo entre ambos grupos desde el 2 de abril, en donde -según indicaron funcionarios iraníes- comenzó a escribirse el texto definitivo del acuerdo, que deberá estar listo antes del 1 de julio, una tarea “complicada y amplia”.
