Ante el entusiasmo general, los jóvenes de San Ignacio crearon una fan page en la red social Facebook, bajo el nombre de Altar de maíz, para que la gente de cualquier parte del país envíe sus ruegos o agradecimientos al Papa.
Cada mensaje es recibido por un grupo de chicos que se encargan de transcribirlos sobre los cocos que revestirán los paneles y paredes del altar.
Hasta el 14 de junio habrá tiempo para remitir los mensajes, antes de que barnicen los paneles de cocos.
De esta manera, el equipo que trabaja en la elaboración del retablo papal busca que todo el Paraguay se involucre.
Unos diez jóvenes del colegio Tañarandy se encargarán de escribir los mensajes en los cocos. La próxima semana, a la vez, distribuirán 16 tablones en distintos barrios de la capital misionera para que la gente pueda aportar las frutas de cocos de sus casas.
La intención es que al ser arrancadas directamente sean colocadas a las maderas y así tener frutas frescas y verdes para cuando sean utilizadas en el altar, de acuerdo a los datos recogidos por Rivarola.
Para el 20 de junio ya tienen que estar los tablones con todos los frutos pegados a los paneles, indicaron.
Luego se dejarán unos cinco días para que se puedan secar bien los cocos con las masas de pegamento hechas con papel maché y engrudo.