Carmen Colmán | ÚH | Coronel Oviedo.
Luego de la extensión del plazo inicial, el Incoop intervino la Cooperativa Coronel Oviedo y la fecha límite para llamar a Asamblea General con los datos que se levanten de la fiscalización e informar a los socios es este sábado.
Según la autoridad de intervención existen posibilidades de salvar la situación para que no se llame a una convocatoria de acreedores.
Humberto González, presidente interino del Incoop, conversó con representantes de socios ahorristas y cañicultores de la cooperativa intervenida quienes expresaron su temor ante un posible quiebre de la institución luego de la intervención realizada.
El mismo manifestó que a pesar del corto tiempo que le resta para encontrar una solución a la situación, existen opciones alentadoras. Señaló que un grupo de socios que está equivocado en cuanto a plazos y procedimientos realizó una convocatoria que no es válida.
Expresó que la intervención llegó a su plazo, sin embargo, quedará una medida de vigilancia focalizada con una orden de trabajo, en la que en la primera falta se volverá a intervenir.
En otro momento, explicó que no se procederá a la liquidación de la entidad cooperativa teniendo en cuenta la real problemática que ocasionaría en la economía de la zona, ya que serán 26 mil las personas que están asociadas las perjudicadas. “Qué inversionista va a querer venir a Coronel Oviedo con un antecedente de quiebra de esta envergadura” indicó.
Presentó dos posibles salidas a la situación. Una de ellas es la de vender la fábrica de alcohol, que es la causante de los problemas. Con ese fin se conversó con dos grupos de inversionistas que presentaron sus ofertas, pero que pidieron uno, un plazo de 10 días y el otro de 60 días para las negociaciones.
La segunda opción sería la de conversar y tratar con los acreedores fiduciarios que son el Banco Regional y Oiko Credit para el salvataje de sus acreencias a través de la integración de una sociedad anónima.
González, indicó que la cooperativa como ahorro y créditos funciona normalmente, pero que el problema está en el pago de las deudas y el mantenimiento de la industria que no está funcionando. El fideicomiso abarca todo el patrimonio más los pagarés endosados de los socios.
En la Asamblea de fiscalización se presentará el informe de números exactos, y se renovará la comisión directiva. Unos 850 socios cañicultores no podrán participar con voz y voto de la misma, ya que no se encuentran habilitados por la situación de morosidad en la que cayeron con el cierre de la fábrica alcoholera.