La ONG señaló que anoche los efectivos leales al Gobierno de Damasco recuperaron el dominio de partes del cementerio islámico y del distrito de Al Sheij Nayar, así como la zona de infraviviendas de Masaken Hanano, en la mitad oriental.
Los combates entre las fuerzas gubernamentales y las facciones islámicas y rebeldes, entre las que figura el Frente de la Conquista del Levante (exfilial siria de Al Qaeda), todavía continúan en el distrito de Al Sheij Said, en el sur de la población, y en Baidín, en el norte.
Mientras, aviones de guerra no identificados han abierto fuego con armas automáticas contra el área de Al Firdús, en el este de Alepo; y la artillería del régimen ha disparado contra Al Salhín.
El pasado día 15 se reanudaron los ataques contra el este de Alepo, sitiado por el ejército y en poder de la oposición, después de más de tres semanas de interrupción.
Cinco facciones sirias, entre las que figuran algunas de las más importantes de la ciudad de Alepo, han aceptado una iniciativa humanitaria de la ONU, que incluye un alto el fuego y el fin de los bombardeos, la salida de los combatientes del Frente de la Conquista de Levante de Alepo y la entrega de ayuda humanitaria.
Asimismo, contempla el establecimiento de una administración local en el este durante un periodo interino.
Sin embargo, el ministro sirio de Asuntos Exteriores, Walid al Mualem, rechazó ayer este último punto, porque considera que “desafía la soberanía del territorio sirio y recompensa a los terroristas”.