CIUDAD DEL ESTE
Tras desatarse un conflicto entre trabajadores casilleros, actualmente ubicados en un tinglado, al costado del predio municipal arrendado por la Comuna a la empresa Estacionamiento del Este SA, la intendenta municipal, Sandra McLeod, pidió el retiro del proyecto que pretende reemplazar el tinglado por un shopping, y que está en estudio en la Junta Municipal.
Muchos de los afectados, que ayer volvieron a manifestarse, denunciaron que no prestaron su acuerdo y que sus rúbricas, que aparecen acompañando al proyecto, fueron falsificadas.
Hay todo un proyecto remitido por la Intendencia municipal, para su autorización en la legislatura, cuyo rechazo es solicitado por un grupo de casilleros, alegando que temen perder sus puestos de trabajo. “Se ha solicitado al presidente de la Junta Municipal la devolución del acuerdo de partes para el proyecto de mejoramiento de las condiciones de trabajo de los 240 vendedores de la vía publica, reubicados en el predio”, refiere el escrito remitido por la intendenta municipal.
DESACUERDO. “El pedido fue realizado basándose en la falta de criterios unificados entre los afectados sobre el acuerdo para la realización de dichas obras”, añade el escrito.
La Intendencia ordenó además un sumario de modo de investigar las denuncias, a fin de aclarar la situación. “Como Municipio siempre estaremos bregando por el respeto a los trabajadores de la vía pública y por la socialización y realización de proyectos que traigan beneficios para todos, sin exclusiones y con amplio criterio social”.
ANTECEDENTES. El predio en cuestión está ubicado sobre la avenida Luis María Argaña y Monseñor Rodríguez, cerca del acceso a la zona primaria del Puente de la Amistad. Se trata de un inmueble arrendado por la Comuna local, dentro del contrato de concesión figura la construcción de un tinglado, donde actualmente están los 304 casilleros.
Ayer, en la Junta, la bancada mayoritaria, integrada por concejales de la oposición, fue clara en expresar que no se aprobará ningún proyecto si es que no hay acuerdo pleno entre todos los afectados. El concejal Miguel Prieto señaló que no está en contra de la construcción del shopping, sí está en contra de que los casilleros queden sin sus puestos de trabajo y que solo se terminen beneficiando a empresarios extranjeros. “Estoy en contra de que este shopping beneficie solo a un extranjero y que los casilleros sean manipulados, chantajeados y, posteriormente, expulsados de ahí”.
Esta versión de Prieto fue desmentida desde la Comuna local, desde donde afirman que ningún casillero perderá su puesto de trabajo.