“Estoy dispuesto a competir con cualquiera, si mi partido y la gente cree que hago una diferencia (...) Algunos dicen que lo estoy pensando. Mi actitud es otra: Yo estoy disponible”, aseveró el exministro socialista en una entrevista publicada hoy por el periódico “El Mercurio”.
“No tengo tabúes. Alguna vez pude haberlos tenido, en el sentido que tenía agradecimientos por algunas personas, pero mi decisión no la tomaré mirándole la cara a nadie. Eso es seguro”, añadió.
El ex secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) entre 2005 y 2015 abordó también los malos resultados del Gobierno en la última encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP) publicada este viernes.
Dicho sondeo reveló que el respaldo a la gestión de la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, cayó hasta un 15 %, mientras su desaprobación subió ocho puntos, al 66 %, la peor evaluación de un mandatario desde el retorno a la democracia en 1990.
Los resultados reflejan que Bachelet no logró mantener el aumento de su aprobación del último sondeo del CEP, que en la encuesta de noviembre pasado subió hasta un 24 % de apoyo, mientras que en esta ocasión sufrió un desplome de nueve puntos porcentuales.
“Hay que verlo en el contexto general de la encuesta que yo creo que es mala para el mundo político. Muestra que la crisis de la política es más persistente (...) esta encuesta debería ayudar a los políticos a ponerse a trabajar para mejorar la imagen colectiva más que obtener ventajas personales”, señaló Insulza.
Asimismo, manifestó su voluntad de apostar por cambios de fondo para revertir el mal resultado del Gobierno de Bachelet en la citada encuesta, en la que obtuvo una nota de 3,3 en una escala del uno al siete.
“Está claro que tiene que haber un cambio de gabinete. Conozco a la mayor parte del gabinete, tengo un tremendo afecto. Pero creo que hay un punto en que se tienen que soltar”, recalcó.
“Algunos ministros deberían darle una mano a la Presidenta y poner su cargo a disposición; no obligarla a ella a que cargue con todo el peso de tener de decirles que se vayan”, concluyó.
Por otro lado, el sondeo reveló que el exministro se ubica como el séptimo político mejor evaluado, a pesar de que sólo un 1 % de los consultados señaló de manera espontánea que le gustaría que él fuera el próximo presidente de Chile.
