El representante legal de la inmobiliaria, cuya identidad no trascendió, manifestó a la fiscalía que la empresa no autorizó ninguna obra de excavación y que tampoco tenían la información de que se estaba realizando este trabajo en el lugar.
Las personas que fueron demoradas por la obra manifestaron que la excavación fue solicitada por un arquitecto de apellido Campuzano, supuestamente para un estudio de factibilidad de suelo, debido a que se pretendía realizar una construcción en dicho lugar.
Sin embargo, no presentaron ninguna documentación municipal que autorice la excavación que fue realizada en la propiedad que se encuentra sobre Oliva entre O’Leary y Ayolas, en el microcentro capitalino.
El subjefe del Departamento contra Delitos Económicos, subcomisario Nelson Barrios, mencionó que la obra fue descubierta luego de una investigación de inteligencia y señaló que se estaba preparando para un golpe en época de la Semana Santa.
En la víspera se tuvo la dificultad de continuar con los trabajos de desagüe, ya que la excavación tiene agua en por lo menos dos metros, y los bomberos no tenían medios para desaguar el pozo.