“Las autoridades egipcias están presionando con determinación para eliminar a los principales defensores de derechos humanos de país”, denunció la directora de HRW para Oriente Medio y el Norte de África, Sarah Leah Whitson.
Un tribunal de El Cairo congeló este sábado los fondos de cinco defensores de derechos humanos en el marco de una investigación sobre la supuesta financiación extranjera de las organizaciones no gubernamentales en Egipto.
“Los socios internacionales de Egipto no deben dejarse engañar por esta forma de represión escondida bajo la apariencia de un procedimiento legal”, añadió la portavoz de Human Rights Watch en un comunicado de prensa.
La medida afecta a Gamal Eid, director de la Red Árabe para la Información de Derechos Humanos; Hosam Bahgat, expresidente de la Iniciativa Egipcias para los Derechos Personales; y Beheieldin Hasan, del Centro de El Cairo para Estudios de Derechos Humanos.
El tribunal también congeló los fondos de Mustafa Taha Adam, director del Centro de Hisham Mubarak para Estudios Jurídicos, y Abdelhafiz al Said, director del Centro Egipcio para el Derecho de la Educación.
Los afectados reiteraron su determinación a seguir defendiendo los derechos y libertades en Egipto e instaron a los grupos políticos y los movimientos populares a que se solidaricen con las organizaciones de defensa de derechos humanos.
Las autoridades egipcias comenzaron la investigación sobre la financiación de las ONG locales y extranjeras en julio de 2011, cinco meses después de que fuera derrocado el presidente Hosni Mubarak.
Desde el golpe de Estado del 3 de julio de 2013 que derrocó al presidente egipcio, el islamista Mohamed Morsi, tanto las ONG nacionales como internacionales han denunciado un continuo deterioro de los derechos humanos en Egipto, incluidas condenas de activistas y el cierre de cinco organizaciones internacionales.
