Es que si no se presentan los imputados, lo que es un hecho ya que están en la ciudad de Montevideo con refugio provisorio, el juez ya podría dictar la rebeldía y librar orden de captura nacional e internacional.
Después puede solicitar la extradición formal en la causa que investiga la supuesta fabricación de bombas molotov en la noche del 31 de marzo durante las protestas ciudadanas contra la enmienda para la reelección presidencial.
No obstante, los abogados Guillermo Ferreiro y Liliana Boccia, quienes defienden tanto a Galeano como a Aquino, al igual que a Stiben Patrón, recusaron al juez Fernández, quien fijó la audiencia de imposición de medidas, tras constatar que no se había notificado a los imputados ante el pedido de rebeldía del fiscal Eugenio Ocampos.
En la solicitud de apartar al juez, hablan de supuesta parcialidad y falta de independencia, ya que el defensor Ferreiro es hijo del senador Adolfo Ferreiro, miembro del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM), donde el juez tendría denuncias.
Con ello, el juez informó al Tribunal de Apelación en lo Penal sobre la recusación. No obstante, probablemente ni siquiera pueda ser estudiada, ya que el juez de la causa, Gustavo Amarilla Arnica, retoma sus funciones este viernes.
Con ello, el pedido de apartar al juez solo serviría para retrasar la audiencia a los encausados.