Nunca es bueno jugar con los sentimientos de los demás. Especialmente si se trata de bromear con una presunta infidelidad, pues el resultado puede costar bastante caro, según publica el portal 24horas.cl.
Eso fue lo que vivió un joven que decidió hacerle una pesada -y creíble- broma a su pareja. El sujeto armó la broma de manera detallada y en el desenlace colocó cámaras en su departamento para registrar el momento en que su novia quedaba sola con su aparato celular.
Cuando el joven se retiró por unos instantes a otro sector de la vivienda, llegó el extraño mensaje. Su novia no pudo aguantar la curiosidad y revisó el celular, momento en que se desató el caos.
De inmediato, la chica comenzó a buscar una maleta mientras intentaba decidir qué hacer, hasta que optó por destruir un “preciado” objeto de su novio antes de salir de la casa.